La guía definitiva para mantener los escritorios de oficina limpios e higienizados de la mejor forma. Te damos una serie de consejos para conseguirlo de manera rápida y efectiva dependiendo del tipo de tablero del escritorio.
Limpiar un escritorio de oficina de melamina
- Realizar un lavado en seco del mueble para eliminar partículas sólidas. Lo ideal es realizar este lavado con un plumero o una aspiradora ya que las partículas de suciedad sólidas pueden rayar la superficie del escritorio de oficina.
- Lavado con un trapo de microfibra húmedo. Cuando las manchas no son agresivas lo ideal es usar un trapo de microfibra humedecido con agua jabonosa (usar un detergente poco agresivo).
- Desinfectar si es necesario, volviendo a pasar el trapo humedecido con una disolución de lejía (1 cucharada por litro de agua). Dejar actuar la disolución durante un minuto y secar muy bien toda la superficie del escritorio de melamina. Desinfectando y secando la superficie evitarás que se genere moho y se deteriore la madera.
Nota: cuando las manchas son agresivas y difíciles de eliminar ( como por ejemplo manchas de bolígrafos o pintura), se recomienda un paso intermedio entre los puntos 1 y 2 en el cual se aplica un producto industrial llamado Thinner acrílico, capaz de eliminar efectivamente este tipo de manchas. Para ello mojar ligeramente un algodón con este producto y frotar de forma lozalizada y sobre la mancha haciendo movimientos circulares.
Limpiar escritorios de oficina de madera maciza
La limpieza de este tipo de escritorios de oficina debe hacerse con un paño o esponja humedecidos en agua tibia y con movimientos longitudinales en el sentido de las vetas de lamadera. Posteriormente deben secarse a conciencia. Nunca deberás usar para la limpieza de los escritorios de madera maciza sustancias como lejía, amoniaco, alcohol, productos abrasivos, dispositivos de agua a presión o vapor y demás elementos agresivos.
Limpiar un escritorio de oficina de tablero relleno de cartón en panal de abeja
Este tipo de tableros se encuentran en las líneas más económicas de algunos fabricantes de mobiliario. Son de baja calidad y se distinguen fácilmente por el bajo peso de los tableros, ya que están rellenos de cartón con estructura de panal de abeja. Debido a este relleno y a que el laminado de superficie no está bien sellado en los cantos la mayoría de veces, su limpieza y mantenimiento deben der más limitados.
La limpieza de este tipo de muebles la realizaremos con un primer lavado en seco con un paño y sin ejercer fuerza sobre la superficie y un segundo lavado con un paño ligeramente humedecido en agua para posteriormente secarlo exhaustivamente. Si no se secan bien, este tipo de muebles tiende a deformarse y acumular humedad en su interior.